Ayuda en Línea de Aplicaciones
En su casi totalidad, las ayudas de las aplicaciones están orientadas exclusivamente a su operación y no incluyen, porque excede sus posibilidades, el contexto con el que interactúan, limitando significativamente al usuario la posibilidad de acceder al conocimiento requerido en tiempo y forma. NORMA K-Factor permite integrar la ayuda en línea de aplicaciones con la base de conocimiento, facilitando un acceso inmediato y sin errores.
Quienes ahora conocemos como "trabajadores del conocimiento", pasan prácticamente todo su tiempo frente a una pantalla, o sea que cuando se les presenta una necesidad de conocimiento relacionado con su gestión, es altamente probable que esa consulta esté vinculada con la aplicación abierta a ese momento. En tanto la consulta exceda aspectos referidos a la operación, el usuario deberá abandonar temporalmente la aplicación, acceder a la base conocimiento (asumimos que dispone de una) y usando las herramientas de navegación y búsqueda disponibles, tratar de localizar los contenidos que satisfacen su necesidad. Aún en una base de conocimiento bien diseñada y mantenida, existe el riesgo que esta búsqueda no tenga éxito o demande más tiempo que el disponible. Este riesgo disminuiría sustancialmente si la consulta pudiera dispararse directamente desde la pantalla de la aplicación en la que se presenta la necesidad, y se accediera directamente al conocimiento necesario. Esto es aparentemente fácil de hacer, basta con enlazar la pantalla de la aplicación con los respectivos contenidos a través de hipervínculos. Decimos aparentemente porque esta solución tiene una vigencia efímera. A medida que los contenidos de la base se van modificando, los cambios impactan en los hipervínculos generando errores e inconsistencias de imposible control, ya que desde la base no se puede saber qué hipervínculos externos están invocando sus contenidos.
La arquitectura Objeto/Relación le permite a NORMA K-Factor ofrecer una propuesta superadora prácticamente sin esfuerzo, al incluir los hipervínculos provenientes de aplicaciones externas en los "mapas" de conocimiento que gestiona automáticamente la herramienta. Así, ante la modificación de un contenido, el responsable puede saber en forma inmediata qué invocaciones internas y externas se verán afectadas, y efectuar las correcciones necesarias, extendiendo los beneficios de Gestión del Conocimiento a la par de reducir las resistencias de los usuarios, disminuir sensiblemente esfuerzos y tiempos de búsqueda, y aumentar la precisión de los resultados.